Yo tampoco tenía a ni idea de qué era hasta que di con un libro sobre la materia de pura casualidad. Estaba en España, y como empieza a ser una costumbre, el primer día que me encuentro libre de niños me hago la ruta de las librerías, a la búsqueda y captura de libros para niños. Esa vez iba buscando un libro para introducir la meditación a través de visualizaciones para intentar calmar a un niño muy inquieto. Encontré un libro que cumplía los requisitos y me lo llevé a casa. Al día siguiente, ni corta ni perezosa, me puse manos a la obra.
Sugerí a mis hijos que se acostaran (lo cual hicieron a regañadientes), y que cerrarán los ojos, (¡ja!¡ilusa! ¿y si por error se dormían? No, ellos no estaban dispuestos a correr el riesgo). De todas formas, empecé con la visualización de un jardín precioso...donde había un árbol...y cada cierto tiempo yo insistía, "¡cerrad los ojos!" ...pero no había manera.
La visualización no resultó como me había imaginado y salí a la búsqueda de más información. Volví a la misma librería y hojeando libros me encontré con uno donde leí "...aunque no insisto, si los niños no quieren, en que cierren los ojos, algunos ejercicios de conciencia sensorial resultan, si lo hacen, más divertidos. Conseguir que los niños cierren sus ojos durante los juegos es más sencillo que hacerles cerrar los ojos durante la meditación". No me hizo falta leer más, estaba decidido que iba a salir de la librería con él. Obviamente era un libro sobre Mindfulness y ese fue mi primer encuentro con esta técnica.
¿Pero qué es realmente? Pues básicamente es intentar ser consciente del momento presente, solemos vivir la mayor parte del tiempo bien revocando cosas que ocurrieron en el pasado o bien proyectando nuestro pensamiento en el futuro y dejamos completamente de lado el aquí y ahora. Y ese estar presente en el momento actual se hace a través de la respiración, o mejor dicho prestando atención a nuestra respiración.
"Vale, y ¿todo esto para qué?"- me diréis-. Pues a través de estas técnicas conseguimos encontramos más descansados, con menos estrés y somos más positivos lo cual en niños pequeños se traduce en una mejora a la hora de calmarse, conciliar el sueño así como de las habilidades emocionales y sociales e incluso en el rendimiento académico.
He de decir que la lectura del libro me resultó de lo más interesante y que aunque no me he puesto a practicar mindfulness de manera regular, hay dos momentos en los que sí que lo aplico. Cuando notó que me acelero porque intento hacer muchas cosas al mismo tiempo, basta con concentrarme un poco en mi respiración para volver al ritmo normal. Y en esos momentos justo antes de perder la paciencia con mis hijos, es suficiente con pensar en retrasar el momento en el que voy a reaccionar, incluso a veces intento no moverme si lo que van a salir por mi boca son sapos y culebras, para que en cuestión de pocos minutos baje el nivel de estrés.
De esto y mucho más nos va a hablar Adriana Rodríguez, psicóloga y experta en mindfulness, el próximo día 12 de marzo en el Centre Culturel de Lalande y os animo a venir porque va a estar muy interesante.
Os dejo aquí abajo toda la información:
¡Atención: número limitado de plazas!
Conferencia gratuita. Taller para niños 5€.
Y después nos despediremos con un aperitivo...
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Attention: nombre de places limité!
Confèrence gratuite. Atelier enfants 5€.
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Attention: nombre de places limité!
Et ensuite nous terminerons autour d'un pot convivial...
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